Et bedre land
Det vakte en del opsigt i medierne, da ministerpræsident Zapatero lod sig portrættere på forsiden af det homoseksuelle blad Zero i sommeren 2005. Inde i bladet havde Zapatero skrevet en eksklusiv artikel under overskriften Un país major – et bedre land.
Kilde: Zero, juli 2005.
Como ciudadano me siento orgulloso de que nuestro país sea referencia de igualdad y respeto. Como hombre aspiro a que nuestro país sea un ejemplo de convivencia con igualdad plena de derechos para todos. Como presidente de mi país debo asumir el desafío de hacer de España un símbolo de paz y tolerancia. Asumí este reto con responsabilidad y con la profunda convicción de que debo ser leal al compromiso político adquirido. Esta ley nos hace mejores como país porque esta ley dignifica a quienes no han sido justamente tratados durante muchos años. Esta ley no resta derechos a nadie pero por fin permite el reconocimiento de la dignidad homosexual.
Esta ley respaldada por la mayoria ciudadana, política y parlamentaria es símbolo de lo que debe ser una democracia moderno. Trabajar por la igualdad nunca ha sido fácil, siempre han existido resistencias a que mujeres y hombres, con independencia de cualquiera de sue diferencias, fuéramas libres e iguales. Los colectivos de lesbianas, gays, transexuales han sabido mantener durante largo tiempo la esperanza de que algún día esa discrimination pudiera desaparecer de nuestra país.
Muchos de ellos han ofrecido grandes dosis de valentía, responsabilidad e imaginación en pos del sueño de un país donde nadie fuese discriminado.
La reivindicación del derecho al matrimonio entre personas del mismo sexo emana del espíritu mismo de nuestra Constitución. Es una propuesta de reforma que no solo no va contra nadie sino que va a beneficiar a toda la sociedad, porque suma sin restar. La nueva Ley implicará una ampliación del derecho que tiene cada ser humano a elegir libremente el camino de su vida y de su busqueda de la felicidad.
Esta vez está en juego mucho más que el derecho a casarse. Es el reconocimiento de la plenitud como seres humanos, de la dignidad, de la igualdad sin condiciones. Queda siempre mucho por hacer aunque a partir de ahora existirá, un antes y un después, una fecha que pasará a la historia como el día en el que lesbianas y gays se vieron reconocidos y alcanzaron la igualdad formal. Un día en el que se reconocerá también la memoria de cuantos han sido víctimas de la homofobia, el machismo, la incomprensión y la intolerancia.
En momentos como el que estamos viviendo, sintamos el orgullo ciudadano de pertenecer a un país moderno que fortalece su cohesión mediante leyes y politicas de libertad e igualdad. España está dando un paso decisivo que la consolidará en el mundo como un símbolo de paz, derechos y tolerancia. No lo hemos sido siempre, pero podemos y debemos serlo ahora. Así nos hacemos cada día un país mejor.